Las Tinturas Madre son extractos curativos de hierbas realizados a partir de la maceración de las mismas en una "Solución Alcohólica"
Una manera de pasar las propiedades de la planta a otro medio, más duradero, más concentrado y más transportable.
A partir de estos extractos, haremos lo que se denomina "microdosis", una primera dilución, con propiedades extraordinarias para el organismo y ventajas que comentaré más adelante.
Pasos para la Preparación de una Tintura Madre:
1. Seleccionar la planta.
Es muy importante seleccionar una planta que conozcamos bien. Si es posible, que crezca cerca de donde vivimos, eso significa que conoce nuestro entorno y sus necesidades y ya se adapto a ellas desarrollando los elementos para sobrevivir y aún, florecer. Recordar que estamos relacionándonos con un ser vivo, cuya energía nos impulsa hacia la curación y fortalecimiento.
2. Elementos necesarios: Frasco de vidrio de boca ancha y tapa hermética.
Planta seleccionada. Puede ser fresca o seca (si está seca esperar que absorba bien la mezcla alcohólica antes de terminar el proceso).
Alcohol de cereal, es el ideal. También podemos utilizar alcohol medicinal, de 96° y sus respectivas diluciones.
Agua destilada (esta agua esta desmineralizada, dura más y asegura la estabilidad de la tintura.
Rótulos y marcador para identificar cada tintura una vez finalizada.
Existe una relación de 200 grs de la planta elegida por litro de solución alcohólica. Esto es relativo, dado el volumen de las plantas en relación a su peso, por ejemplo 200 grs de aloe vera, tiene un volumen menor a 200 grs de diente de león, hierba que ocupa mayor espacio y por consiguiente mayor dosis alcohólica.
Lo ideal es el siguiente método: poner la planta en pequeños trozos en el frasco (dejando lugar para que la solución alcohólica la cubra y la sobrepase cinco centímetros. Resulta fácil y se obtienen unas tinturas espectaculares.
3. Solución alcohólica:
La solución alcohólica es una mezcla de alcohol de cereal y agua destilada, la cantidad de cada una depende de la parte de la planta que vayamos a utilizar:
Para flores: mezclamos a partes iguales el alcohol con el agua destilada. Otra manera opción es utilizar glicerina y alcohol de 96% en partes iguales.
Para hojas: 70% de alcohol y 30% de agua.
Para estructuras más densas, como raíces, podemos utilizar el alcohol directo, sin diluir.
Realizada la dilución correspondiente, se llena en frasco con la planta seleccionada (no poner primero el alcohol porque quema a la planta), se cubre con la dilución alcohólica y se la sobrepasa cinco centímetros.
4. Resguardo:
Tapamos el frasco, etiquetamos con la fecha y nombre.
Lo guardamos en un lugar fresco y oscuro durante 14 días, mínimo. Si quieres extender el tiempo, puedes dejarlo 21 días, o 28, agitando cada tres días, revisando que la solución alcohólica siga cubriendo la hierba. si es necesario se rellena y vuelve a tapar.
5. Envasado final:
Transcurrido el tiempo deseado, se cuela con papel filtro, gasa o colador de acero inoxidable, separando la hierba que ya pasó sus propiedades a la solución alcohólica. se conserva esta solución (tintura Madre) en un frasco de color ámbar. Se tapa bien y etiqueta nuevamente con el nombre de la tintura madre.
6. Modo de utilizar:
Las tinturas pueden utilizarse de maneras diferentes, cada terapeuta herbal o floral maneja su propia técnica. En particular, resulta óptimo administrar microdosis preparadas a partir de Tinturas Madre. Procedimiento que permite evitar la toxicidad por exceso y trabajar el poder de las plantas a nivel sublingual, sin la necesidad de ingerir el producto. Es decir, resulta mucho más ventajoso tanto para nosotros, ya que no corremos riesgos de toxicidad, como para las plantas, porque necesitamos menos cantidad.
MICRODOSIS A PARTIR DE TINTURAS MADRES
Al tomar una pequeña cantidad de sustancia herbal incentivamos al cuerpo a activar sus propios recursos, su compatibilidad con la esencia. No es importante la cantidad de ésta, porque de hecho, ya se encuentra en nuestro cuerpo en mayor proporción, por eso una microdosis introducida desde el exterior puede activar las macrodosis de nuestro sistema orgánico. Somos altamente compatibles con las plantas.
Estamos acostumbrados a pensar en cantidad, pero el secreto no radica ahí, sino en la compatibilidad, en nuestra capacidad de respuesta, en hallar la esencia que despierta nuestro poder dormido de autocuración.
Con las microdosis la sustancia es lo suficientemente mínima como para evitar los riesgos de toxicidad por sobredosis.
De una sola Tintura Madre podemos elaborar mayor cantidad de Microdosis, lo que significa que estamos pidiendo al Reino Vegetal menos de su sustancia, al necesitar menos cantidades de plantas, esta es una forma de agradecerle su servicio, de fortalecer nuestra relación con él, de hacernos más dignos de sus beneficios.
Las plantas son la máxima pureza de la energía en amor.
MATERIALES Y MÉTODOS
Frascos goteros
Tintura madre elegida
Agua destilada
Rótulo y marcador
1. Procedimientos:
Un procedimiento sencillo es:
Tomar el frasco gotero y dividirlo en 10 partes iguales.
Se agrega una parte de tintura madre y el resto (nueve partes) de agua destilada.
Otra manera, sencilla también, es multiplicar por dos el volumen del envase y su resultado será la cantidad de gotas que utilizaremos por frasco.
Un ejemplo, si el frasco es de 100c.c, utilizaremos 200 gotas. Si es de 20c.c utilizaremos 40 gotas. Si es de 50c.c, 100 gotas.
Importante saber la cantidad de ml. del frasco ámbar, pondremos el doble en gotas de Tintura Madre.
Con cada gota, ponemos intención, pensamiento y sentimiento a la sanación.
2. Dosificación:
Adultos: Fase "impregnación": para empezar el tratamiento, el primer día, dos gotas sobre la lengua cada diez minutos durante la primera hora y dos gotas cada hora el resto del día, respetando las horas de sueño. Para los siguientes días: dos gotas sobre la lengua cuatro veces por día. Las dos primeras en ayunas, la última antes de acostarse, y las otras dos dosis, 1/2 hora antes del almuerzo y de la merienda. Puede tomarse el tiempo que sea necesario, como también auto regular la dosis, hasta sentir alivio.
Para tratar un dolor puntual:
Primera fase: "impregnación" dos gotas sobre la lengua cada 5 minutos hasta el mejoramiento de los síntomas.
Segunda fase: "fortalecimiento" dos a cinco gotas cuatro veces al día durante el tiempo que sea necesario.
Niños: Recomiendo la dilución al 1%, también se puede utilizar diluidas en jugos de frutas naturales, dos veces por día. Otra manera es impregnar un algodón y adherir al ombligo un par de minutos, para que se absorba a través de la piel. También podemos hacer masajes utilizando aceite para bebé y unas gotas de tintura.
La duración del tratamiento depende de cada uno, de la respuesta a la sustancia, la intensidad disarmónica del organismo, la sintonía y afinidad de nuestros sentidos para conectarnos con ellas y encontrar la planta que se asocia a uno mismo.
Escrito por: María José Molina
Licenciada en Nutrición. Especialista en nutrición y cocina ortomolecular, especializada en el abordaje integral del paciente. www.mariajosemolina.com
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